Angel y Noelia son una pareja muy unida a la que lo único que les quedaba era darse el sí quiero. Para ese gran día querían algo especial y decidieron que Torre Gallén reunía todos los requisitos para su gran celebración. La ceremonia civil tuvo lugar en el patio del edificio de la torre, donde los sentimientos estaban a flor de piel y las lecturas de sus más allegados, se entrecortaban entre suspiros y llantos de alegría por el gran momento. Después tomaron un aperitivo en los jardines antes de empezar la gran fiesta en el salón, donde los regalos iban y venían para unos y para otros. Los novios culminaron la fiesta con un baile nupcial inspirado en la película Grease y seguidamente todos los invitados inmortalizaban ese gran día en el photocall que también estaba inspirado en la película.